miércoles, 20 de junio de 2012


Cómo explicar la crisis de manera sencilla. (El timo más antiguo del mundo)

Hace unos días un prestigioso asesor financiero se prestó a explicar la crisis que estamos viviendo de una manera sencilla para que la gente de a pie pudiese entender sus causas y sus consecuencias.

Así lo explicaba:

Una persona se presenta en una aldea en la que nunca antes había estado, ofreciendo a sus habitantes 100.-€ por cada burro que le vendieran y una buena parte de la población le vendió sus animales.

Al de unos días volvió y ofreció un mejor precio; 150.-€ por cada uno de los burritos y otra buena parte de la población vendieron los suyos.

Transcurridos unos días volvió a pasar por la aldea y ofreció 300.-€ por cada animal y el resto de la gente vendió los últimos burros que les quedaban.

Una vez que comprueba que no quedan más animales disponibles, el hombre ofrece 500.- € por cada burrito que le faciliten, al mismo tiempo que indica que a la semana siguiente pasaría y compraría los que hubiere y se fue.

Al día siguiente mandó a la aldea a uno de sus ayudantes con los burros que había comprado anteriormente, para que los ofreciera a 400.-€ cada uno.

Ante la posibilidad de ganar dinero en unos pocos días, los vecinos compraron los burros a 400.- € . El que no tenía dinero lo pidió prestado y es más compraron todos los burros de la comarca.

Como ya imagináis, el ayudante desapareció, al igual que su jefe y nunca más se supo de ellos, resultando al final que la aldea estaba llena de burros y de endeudados.

Hasta aquí es lo que el asesor contó, pero veamos lo que ocurrió después:

Los que habían pedido dinero prestado, al no vender los burros, no pudieron pagar los préstamos.

Los que habían prestado dinero se quejaron al ayuntamiento, diciendo que si no cobraban se arruinarían y entonces no podrían continuar prestando y como consecuencia se arruinaría también todo el pueblo.

Para que los prestamistas no se arruinaran, el alcalde, en lugar da dar el dinero a la gente del pueblo para pagar sus deudas, se lo dio a los propios prestamistas. Pero éstos, ya cobrada una gran parte del dinero, no perdonaron las deudas a los del pueblo, que siguieron igual de endeudados.

El alcalde dilapidó así el presupuesto del ayuntamiento, que quedó también endeudado.

Entonces pidió dinero a otros ayuntamientos, pero se negaron a ayudarle porque, como estaba en la ruina, no podría devolver lo que le prestasen.

Resultando que:

            Los listillos del principio, forrados.

Los prestamistas, con sus ganancias resueltas y un montón de deudores a los que seguir cobrando lo que les prestaron más los intereses, e incluso adueñándose de los ya devaluados burros con lo que nunca llegarían a cubrir toda la deuda.

Mucha gente arruinada y sin burro para toda la vida.

El ayuntamiento igualmente arruinado.

Y finalmente para solucionar esta preocupante situación y salvar a todo el pueblo, el ayuntamiento decide “bajar el sueldo a los Funcionarios”.

PD: “El estado realiza los recortes que todos estamos conociendo”:

sábado, 12 de mayo de 2012

Utilizamos el sentido común?

Las prisas nunca fueron buenas consejeras, y parece que yo hago demasiado caso al dicho, parloteando poco por el blog, tampoco es que le importe demasiado al personal, nadie me grita, ni me anima.
Una pequeña historia por si le viene bien al resto de los mortales.

El negocio:


Una vez me pusieron un ejemplo muy sencillo para evitar se engañados por los pillos, os lo comento:

Un empresario local, bueno como ahora se dice un “emprendedor”, promueve una reunión en su localidad, con el objetivo de de vender el 50% de su empresa, bueno vender no era el término exacto que utilizaba, lo disfrazaba con un léxico más técnico, que ahora mismo no recuerdo.

Había logrado reunir a un grupo importante de gente de la localidad y sus alrededores y entre ellos se encontraba un padre y un hijo.

El hijo pronto se animó a comprar participaciones de ese negocio, pero no llegaba a comprender bien el término que utilizaba el presunto pillo y preguntaba a su progenitor insistentemente.

Mientras el pillo, una vez que había explicado técnicamente las bondades de la oferta, no hacia más que insistir en lo mismo:

Lo que les ofrezco es en consideración a ustedes, a sus familias, a todo su entorno, ustedes han hecho realidad el negocio, sin ustedes no hubiese sido posible y es mi forma de agradecérselo.
Este negocio que les ofrezco, es una ganga.
Demostrado por los libros contables, el negocio se puede valorar en la cantidad “X” y yo, les estoy ofreciendo el 50% de “X”, por la ½ de su valor, es decir que con una cantidad igual a ¼ de “X”, ustedes se hacen propietarios del 50% del negocio, interesante verdad?.

Había un asistente, junto a ellos dos, que mostraba un gran interés por la propuesta de negocio, así como el joven hijo; su padre no tanto, recelaba.
El hijo tenía aún alguna duda, no terminaba por comprender del todo, el término utilizado, era para él demasiado técnico y preguntaba insistentemente a su padre y éste a su vez callaba.

Al final el asistente para ellos desconocido, se dirige al padre, comentando que él está decidido a invertir, que le parece una oferta que no se puede dejar pasar y se levanta despidiéndose.

El hijo anima a su progenitor a que se apresure, de lo contrario perderán la posibilidad de negocio. El padre responde que él no invertirá y añade D. Fulano, con el ¼ de “X”, gana dinero, así que yo no compro y ya de paso con esto respondo a tu pregunta, referente a ese dichoso término técnico que ni tú, ni yo, logramos entender.

Hasta otro ratico.

sábado, 14 de abril de 2012

O lo cuento o reviento

No tengo disculpa lo sé, en mi descargo decir que ultimamente me ha pillado holgura el cuerpo.

Hace ya un tiempo que algo me ronda por la cabeza. Quizás sea un disparate pero si no lo cuento reviento.
Mayormente pensamos que la Democracia es el sistema de gobierno que más ayudaría a igualar nuestras diferencias sociales, y lo es, ojo no pretendo atacar a la Democracia, al menos a la que se puede escribir con letras mayúsculas.
Muchos pensábamos que con nuestros impuestos y los impuestos de los que más tienen, (por cierto los que menos impuestos pagan, si es que llegan a pagar alguno), poco a poco se irían minimizando las diferencias sociales, pero leñes, no parece que ello ocurra, más bien es todo lo contrario. Por qué será?.
Pues parece ser, que esas minorías poderosas, en el sentido más amplio de la palabra y sin escrúpulos, tienen el pensamiento contrario y lo están poniendo en práctica, desde ya hace bastante tiempo.
Ellos son conocedores de los entresijos de los estados, me atrevería a decir, que incluso los dirigen desde la sombra y decidieron en su día, que era mejor repartirse los dineritos de todos, entre unos pocos, ya se sabe cuántos menos en el reparto a más se toca, y en ello estamos.
Para qué si no, quieren el abaratamiento del despido?, qué tiene que ver el abaratamiento del despido con la creación de empleo?.
A mí, se me ocurre que una buena razón pudiera ser la siguiente:
Creo empresas en el sector que esté subvencionado y mientras esté subvencionado; para que una vez se haya terminado la subvención, la cierro y claro el despido es baratísimo y siguen acumulando más y más beneficios, esos que ahora se les llama "emprendedores" y se le llama así con razón, ahora volverán a crear otra nueva empresa en el sector industrial que nuevamente vuelva a estar subvencionado y así una y otra vez.
Amen, de exención de impuestos, rebajas en las cotizaciones de la SS, salarios de subsistencia, condonaciones de fraude fiscal...., mejor no sigo que se me revuelven las tripas.
Cómo ya he dicho por ahí arriba, en ningún momento pretendo atacar a la DEMOCRACIA escrita con mayúsculas, no se me vayan los sables y sus coroneles a cruzar en el camino.